Contra todo pronostico: El primer gran título de Ferguson

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Hay entrenadores que siempre quedarán en la historia del fútbol debido a sus grandes logros dirigiendo adentro de una cancha. Nombres como Helenio Herrera, Mario Zagallo y Arrigo Sacchi hoy en día siguen siendo recordados por su relevancia en el deporte rey y sin dudas alguien al que no se puede omitir al hablar sobre directores técnicos es al escosés Alex Ferguson que a pesar de ganarlo todo con el Manchester United comenzó a forjar su leyenda con el Aberdeen de su país natal. 

   Se jugaba la final de la Copa de Escocia de la temporada 1981/82, y The Dons bajo las ordenes de Ferguson goleaba 4 a 1 al Rangers, se consagraba como campeón y clasificaba por segunda vez a la ya extinta Recopa de Europa, un torneo al que se clasificaban los ganadores de las copas nacionales.

   Con la ilusión de conseguir una buena participación en el torneo europeo el Aberdeen comenzó en la fase previa vapuleando al Sion de Suiza ganándole 3 a 1 en la ida y 8 a 0 en la vuelta para clasificar de manera cómoda a los dieciseisavos de final, en donde un 1 a 0 en el primer partido frente al Dinamo Tirana de Albania fue suficiente para avanzar a octavos.

   Ya entre los 16 mejores la nueva víctima del equipo escocés fue el Lech Poznan de Polonia. Un 2 a 0 en la ida y un triunfo por la mínima en la vuelta le dieron el pasaje a los cuartos frente al mítico Bayern Múnich que había eliminado al Tottenham. Ante la sorpresa de todos el Aberdeen logró un increíble empate sin goles en el primer partido disputado en Alemania, algo que ya era suficiente. Sin embargo, los dirigidos por Ferguson consiguieron una victoria inesperada al imponerse 3 a 2 en la vuelta y se metieron entre los cuatro mejores del torneo.

   Aunque haber eliminado a un gigante ya era suficiente, The Dons quería llegar por primera vez en su historia a una final europea por lo que el cruce frente al Waterschei Genk de Bélgica era una fase decisiva. No obstante, los belgas no estuvieron ni cerca de ser competidores de los escoceses que se impusieron 5 a 1 en la ida y cayeron 1 a 0 en la vuelta. 

   Con la llegada a la final, Ferguson ya era más que amado por los hinchas que verían por primera vez a su equipo jugar el partido decisivo por un título europeo nada más y nada menos que frente al Real Madrid dirigido por Alfredo Di Stéfano.

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   El partido se jugó en Suecia y en apenas cuatro minutos el delantero Eric Black puso el 1 a 0 parcial para que deliren todos los fanáticos del Aberdeen que veían como se lograban convertirle un gol a los Merengues. Sin embargo, a los 15´ Juanito de penal igualó el encuentro para irse al descanso 1 a 1. Ya en el segundo tiempo ninguno de los dos se sacó ventaja por lo que el partido debía continuar en el alargue.

   Cuando ya se jugaba el minuto 112, John Hewitt (que había ingresado a los 87´) puso el 2 a 1 para los de Ferguson que estaban a solo pocos minutos de conseguir un título europeo y encima frente al Real Madrid. Los escoceses aguantaron, el arbitro pitó el final y el Aberdeen conseguía por primera vez en su historia un campeonato continental nada más y nada menos que de la mano de uno de los mejores de la historia: el eterno Sir Alex.