Contra todo pronóstico: De Uruguay para el mundo

Foto: sebastianribas.blogspot.com

Pocos campeonatos juveniles de clubes pueden jactarse de ser tan prestigiosos como el Torneo de Viareggio, que en sus siete décadas de existencia ha sido dominado casi en su totalidad por los equipos italianos, que oficiando de locales se han quedado con 60 ediciones. A lo largo de los años las sorpresas no han sido tantas como uno podría esperar, aunque en el palmarés sobresale una humilde institución uruguaya que en 2006 dejó boquiabiertos a todos y se alzó con el trofeo: Juventud de Las Piedras.

   Con un equipo conformado por jugadores desconocidos de este lado del charco salvo por Rodrigo Mora y Sebastián Ribas, actuales delanteros de River y Lanús respectivamente, los pedrenses emprendieron el viaje a Italia para integrar el Grupo 5 junto al todopoderoso Inter de Milán, el Ternana de segunda división y el ignoto Cisco Roma de la cuarta categoría.

   Allí, dirigido por el experimentado Julio Ribas, padre de Sebastián y actual técnico de la Selección de Gibraltar, Juventud comenzó haciendo ruido y derrotó al Nerazzurri por 1-0 en su debut, para luego superar por 2-1 a los romanos y también por 1-0 a los de la Serie B.

   Ya en octavos de final el rival sería el Triestina, que por aquel entonces deambulaba por la categoría de plata del calcio. Tras igualar sin goles en el tiempo reglamentario llegó la hora de los penales, donde los tanos se impusieron por 3-2. Entonces, ¿cómo es que los uruguayos salieron campeones? Fácil. Los vencedores habían incluido mal a un jugador, por lo que la victoria fue para el Juve.

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   Entre los ocho mejores aguardaba el Treviso, que pese a encontrarse en la máxima categoría cayó sin atenuantes por 2-0. Así, Juventud pasaba en apenas un par de días de estar eliminado a meterse en semis con Ribas como referencia goleadora. El desafío ahora era contra otro equipo de la Serie A, Siena, que sufrió un durísimo 3-0 y dijo adiós. Los botijas de Las Piedras estaban en la final.

   Como no podía ser de otra manera, en la definición por el título debían medirse con la Juventus, que había ganado las últimas tres ediciones de la competencia. El humilde Juve contra la todopoderosa Juve. Sin embargo, y gracias a las maravillas del fútbol, los desconocidos uruguayos superaron 1-0 a la Vecchia Signora de Marchisio y Giovinco con un gol de Ribas.

Foto: aguantenche.com.uy

   El batacazo estaba consumado. Y en Uruguay se los hicieron saber, ya que en su retorno al país fueron recibidos por un gran número de aficionados. Juventud de Las Piedras había escrito la página más gloriosa de su historia.