Destinos exóticos: Un final particular

Foto: elmundo.es

Cuando los jugadores llegan a el ocaso de sus carreras, algunos cuentan con un buen rendimiento que les permite desempeñarse en el club que desean, otros, gracias a los méritos y logros conseguidos en sus mejores años reciben ofertas de equipos que militan en ligas menores pero poderosas desde lo económico y también están los que “desaparecen” del mapa y se van a desplegar su juego a países con poca tradición futbolística. A éste último grupo pertenece el español ex integrante de La Furia, Albert Riera.

   Polifuncional de la banda izquierda, se caracterizó por ser volante, aunque supo jugar de extremo y de lateral en ocasiones. Inició su carrera en Mallorca, quizás, en el mejor momento histórico del club, ya que cuando nuestro protagonista en cuestión dio el salto a la Primera División, el equipo finalizó tercero en la liga, logrando su mejor posición y la clasificación a la Champions League.

   Pese a alternar entre la filial y el primer equipo, Riera tuvo acción en la Liga de Campeones y disputó tres encuentros. En la temporada siguiente, la 2002/03, se afianzó definitivamente como titular y fue parte de la Copa del Rey conquistada por el Mallorca ante Recreativo de Huelva en la cual brilló Samuel Eto'o.

   El buen nivel mostrado por el volante zurdo provocó que muchos equipos se interesen en él, pero fue finalmente el Girondins de Bordeaux quien se hizo con sus servicios. Tras dos años, regresó a su país natal para jugar en el Espanyol, pero no tuvo continuidad en su primer año, por lo que se fue cedido al Manchester City. En Inglaterra jugó poco pero en su retorno al club catalán se afianzó y debutó en la Selección española ante Dinamarca con triunfo 3-1 y un gol suyo por las eliminatorias rumbo a la Eurocopa 2008 disputada en Austria y Suiza.

   Aunque no fue parte del combinado campeón del mencionado torneo, Riera atravesaba su mejor momento futbolístico y fue comprado por el Liverpool, en donde jugó dos años. Posteriormente, tuvo pasos con éxitos por Olympiacos de Grecia y Galatasaray de Turquía, ya que en ambos equipos fue campeón. Pese a eso, no contó con más oportunidades en España, donde estuvo presente en 16 encuentros y anotó cuatro goles.

   En 2015, luego de tener pasos negativos con Watford y Udinese, sumado a una vuelta al Mallorca sin éxito que finalizó en una discusión con el entrenador Miguel Soler, llegó al fútbol de Eslovenia en busca de continuidad para seguir desplegando su juego en los últimos años de su carrera. No obstante, no lo logró, porque solo disputó 12 partidos con el DNS Zavrc, en donde anotó un gol, y tan solo uno con el FC Koper.

Foto: elgoldigital.com

   Sin embargo, a pesar de jugar tan poco en el Koper, no estuvo tan inactivo, ya que además de jugador, Riera era el director deportivo del club. Al salir de Eslovenia, el manacorí recibió ofertas de Bulgaria, Tailandia y Finlandia, pero las rechazó para aceptar la propuesta del Tomsk de Siberia, equipo más oriental de Rusia en donde las temperaturas rondan los 17 grados bajo cero y las distancias para jugar de visitante son enormes, ya que, por ejemplo, hay casi 3500 kilómetros hasta Moscú.

   Finalmente, el traspaso no se pudo hacer efectivo porque el club tenía un veto por parte de la Federación Rusa que le impedía adquirir futbolistas. En enero de éste año, Riera decidió que era momento de retirarse y dejó la actividad profesional, con un cierre de carrera extraño para alguien que supo ser parte de la Selección española y será recordado por sus buenas actuaciones principalmente en Liverpool y Mallorca.