Un logro que nunca imaginaron

Cuando se nombra a Dinamarca en el mundo del fútbol, se piensa en un equipo que cada tanto se clasifica a una Copa del Mundo y que suele pasar sin pena ni gloria por las Eurocopas. Sin embargo, en 1992 lograron levantar el trofeo continental, un torneo al que no clasificaron pero la disputaron como invitados.

La Eurocopa de Suecia '92 quedará para siempre como una de las más inusuales de la historia. A pocas semanas de que arrancara el torneo, Yugoslavia fue expulsada debido a la Guerra de Los Balcanes, dejando un lugar vacante que la FIFA decidió ocupar con los daneses, los cuales habían terminado segundos y pensaban ver el torneo por televisión.

   Con Peter Schmeichel, Henrik Larsen y Brian Laudrup, (Michael Laudrup, principal figura del equipo, decidió no participar ya que creía que no tenían chances) El Tomate Mecánico comenzó el torneo empatando sin goles ante el combinado inglés. Durante el segundo encuentro perdieron por la mínima ante los locales y debían enfrentarse ante Francia, por lo que la eliminación era inminente. Sin embargo, lograron ganarle a Les Blues 2 a 1 y alcanzaron una agónica clasificación a semis.

   Llegar a los mejores cuatro ya era un logro increíble para los nórdicos que ni se imaginaban disputar una instancia tan lejana. Del otro lado se encontraba su máximo rival, Países Bajos, la actual defensora del titulo. El primer tiempo comenzó a favor de Dinamarca que se fue al descanso ganando 2 a 1, no obstante, la Naranja Mecánica, igualó y consiguió que el partido terminara empatado en dos.  En la tanda de penales la leyenda holandesa, Marco Van Basten, erró el penal, nadie más falló y el Tomate Mecánico llegó por primera vez a una final.
   A pesar de que todo era fiesta, el rival era Alemania, la ultima campeona del Mundial y una de las mejores selecciones del mundo. Pero a los daneses no les importó y a los 18 minutos ya ganaban 1 a 0 ante la sorpresa de los alemanes que no entendían a quienes se enfrentaban. En el segundo tiempo los nórdicos continuaron dominando y a 10 del final consiguieron el 2 a 0 definitivo con el que se consagraron campeones. Con este logro, el Tomate Mecánico se convirtió en la única selección en lograr ser campeona de un torneo sin haber clasificado.

   En el 2017 con Kasper Schemeichel, Andreas Christensen y Christian Eriksen a la cabeza, lograron acceder al repechaje, golear a Irlanda y clasificar al Mundial. El fútbol es un deporte que siempre da sorpresas y los daneses ya lo saben ¿Lo repetirán en Rusia?